Consejos en la montaña
Todo lo que se expondrá a continuación es muy importante para saber reaccionar en situaciones críticas y no tan críticas. Es una recopilación de normas de clubs de montaña y de la propia Guardia Civil. Este es un apartado en el que quiera colaborar con sus experiencias puede ponerse en contacto conmigo mediante la zona de Email.
Hay que tener en cuenta que el montañismo potencialmente es un deporte con riesgos.
La montaña es de por sí un medio hostil para el hombre. En ella los únicos medios de los cuales se puede valer una persona es su propia experiencia y el equipo que carga en su mochila o en la de sus compañeros.
Para disfrutar del excursionismo en cualquier parte, ya sea para excursiones cortas o largas, travesías o cimas, lo principal es la seguridad, que además va siempre unida al disfrute de la actividad.
Temas:
- Normas básicas
- Consejos a tener en cuenta siempre que salgamos a patear montes
- Como dar aviso en caso de accidente
- Normas en la montaña
- Seguridad y recomendaciones
- Situaciones de emergencia o peligro
- Enfermedades provocadas por la altitud
- Que hacer ante un accidente o una situación de emergencia
Normas básicas
Escoge bien tus excursiones y actividades, elige la zona adecuada, no sobre valores tus fuerzas y capacidad. Sal con compañeros mas experimentados que tú. Nunca salgas solo.
Deja dicho al guardia a donde vas y que recorrido vas a hacer, y luego no perderlo en caso de perdida o accidente para facilitar el rescate.
Piensa que las zonas Montañosas tienen un clima con cambios frecuentes de temperatura donde lo fácil se vuelve difícil y peligroso.
Desconfía de la niebla pues se puede perder el mejor conocedor de la zona, permanece en el lugar si crees estar perdido así los grupos de rescate te encontrarán primero. No te alejes mucho del camino y busca cualquier abrigo natural y espera.
Llevar siempre equipo suficiente, materiales ligeros y cálidos saco de dormir, mudas y calcetines de repuesto, en invierno asesórate antes de una excursión (servicio metereológico, refugios, protección civil, etc).
No tengas prisa en la montaña, debes disfrutarla no sufrirla, no es necesario llegar a la extenuación, pues tienes que llegar a casa que es donde termina la excursión.
El conocimiento de la montaña se adquiere a través de muchas salidas a la montaña y mucha paciencia.
Lleva siempre comida ligera, efectúa cortos descansos en lugares abrigados del viento y del frío.
Nunca abandones a tus compañeros y sigue los consejos de los lugareños y de los guardas de los refugios pues son los máximos conocedores del lugar.
No alteres la paz y el silencio de la naturaleza. Nunca tires piedras en la montaña, especialmente en las gargantas, desfiladeros, cortados, etc.
Cuida el paisaje, la flora y la fauna como preciado tesoro y legado para nuestros descendientes.
Respeta la propiedad privada y los animales domésticos.
Aprende a renunciar, si no logras realizar la actividad hoy, lo harás mañana. Si caes es fácil que nunca logres hacerlo.
Consejos a tener en cuenta siempre que salgamos a patear montes
Preparar cuidadosamente el itinerario en función de las capacidades físicas y técnicas de los participantes. No meterse en terrenos demasiado difíciles o altos si no estamos preparados para ello o no contamos con el equipo adecuado. Dejar un margen entre nuestra capacidad física y el recorrido es importante (es decir, "ir sobrados") para poder hacer frente a cualquier problema o dificultad inesperados. Además, cuanto más sobrados vayamos, más disfrutaremos y mejor humor nos acompañará.
La alta montaña, los recorridos glaciares con piolet y crampones, las trepadas y escaladas con necesidad de cuerda y el barranquismo requieren experiencia, ir acompañado de alguien experto y tiempo y progresión.
Hacer un cálculo horario realista. No soñar en casa con etapas que en la práctica son irrealizables. Al tiempo marcado en las topoguías (calculado siempre sin paradas de ningún tipo) habría que añadir un 30% de más sin contar el rato que vamos a parar a comer. Calcular una media de 300 m. por hora de subida a ritmo regular y 400 de bajada (100 m. más si se esta preparado), aunque esto puede cambiar dependiendo de la pendiente. Calcular en terreno llano unos 3 Km por hora. Añadir siempre el 30% arriba indicado y el tiempo de comer. Informarse sobre el itinerario todo lo posible antes de salir.
Ir bien equipados con respecto a la época del año y el terreno en el que vamos a movernos. El mejor material no es el más caro, sino el más adaptado a lo que queremos hacer. Cuidar especialmente la mochila (siempre algo sobrada de sitio, cómoda, acolchada y con buen cinturón), las botas (cómodas y adaptadas al terreno, comprarlas por la tarde cuando los pies están algo hinchados y con un solo par de calcetines) y el material contra la lluvia y el frío en las regiones frías. Ir preparados para los cambios bruscos de tiempo.
Reservar refugios y albergues siempre, aunque sea temporada baja. Nunca se sabe, y no seríamos los primeros que terminan durmiendo de malas maneras en el monte.
Dominar las técnicas de orientación y el uso de mapa y brújula debería ser el A-B-C del excursionista. Gran cantidad de accidentes se producen en lugares aparentemente fáciles debidos a perdidas y desorientación; terrenos conocidos pueden convertirse en un problema en caso de niebla. Practicar frecuentemente para no olvidar las técnicas.
Enterarse del tiempo que va a hacer por los boletines meteorológicos y actuar en consecuencia. No hacerse el listillo en caso de mal tiempo. Si en verano se prevén tormentas, salir muy pronto y llegar a la siguiente etapa lo antes posible. Aprender a ver venir el mal tiempo por nosotros mismos.
Comer bien es importante. El desayuno ha de contener grandes cantidades de líquidos, glúcidos (lentos y rápidos) y alguna proteína para distribuir bien estos últimos. La comida ha de ser ligera pero completa, y la cena "con fundamento" y variada (como cuando nos invita nuestra mamá). Que no falten para el camino barras de cereales o cosillas azucaradas para evitar la hipoglucemia.
Beber mucho es fundamental. Solo con un 2% de perdida de peso corporal por sudor perdemos un 20% de capacidad física. Con un 4% perdemos un 40% de capacidad física. Beber antes de llegar a tener sed y calcular unos 4 litros por persona y día. Hidratarse antes, durante y después del recorrido. La orina amarilla es síntoma de deshidratación; así pues, controlar que esté siempre clara. Cuando hace fresco tenemos pocas ganas de beber pero perdemos agua igual: beber aún sin sensación de sed. Ojo de donde se coge el agua; desconfiar del agua superficial si hay ganados y -sobre todo- asentamientos humanos por encima; los manantiales no son siempre una garantía. Lo mejor son las fuentes de los pueblos. Si estamos en zona seca no dudar en llevar una cantimplora más grande. Añadir sales o preparados al agua de fusión de nieve.
Todo excursionista o montañero debería seguir un curso de Primeros Auxilios y socorrismo, y mejor si además está adaptado a la actividad excursionista. Debería ser indispensable para todo aquel que acompaña grupos (monitores, maestros...). En caso de accidente o enfermedad es indispensable saber qué hacer pero sin sobrepasarnos; un remedio mal aplicado es peor que la enfermedad. No dar medicinas ni aplicar tratamientos que no se conocen bien. Salvo que se sea médico, no hay que llevar en el botiquín más que medicamentos que se conocen, de amplio espectro y que no causen efectos secundarios. Lo mejor: el curso de socorrismo y los manuales especializados. En caso de duda (pero no por vicio) no dudar en pedir una evacuación.
No es recomendable salir solo al monte. Mejor en pequeño grupo lo más homogéneo posible; si el grupo no es homogéneo, lo más expertos deben estar "al loro" de los menos. Que todo el grupo esté de acuerdo sobre esto.
En caso de accidente, un teléfono móvil (falta cobertura en la mayoría de las zonas "perdidas", aunque con práctica se le puede sacar un cierto rendimiento) o emisora (sigue siendo la mejor posibilidad) pueden ser necesarios. Indicar al grupo de rescate el lugar preciso (o la zona y la altitud), lo que ha pasado, el número de heridos, los síntomas, las condiciones de visibilidad en el lugar.
- Mantener la tranquilidad, pero no perder el tiempo.
- Llamar al refugio y al grupo de rescate y localizar el sitio exacto del lugar del accidente.
- Hacer un reconocimiento a la persona herida, puede haber heridas ocultas, más graves, pero todo sin mover al herido.
- Acostar al accidentado sobre la espalda, lo más cómodo posible si está congestionado elevarle un poco la cabeza inclinarle hacia un lado por si vomita, arropar al herido para que no pierda calor.
- Hacer todo esto con mucho cuidado.
- No mover al herido sin cerciorarse de su estado.
- En caso de lesión espinal no moverlo.
- Tener en cuenta que la hemorragia y la falta de respiración hay que tratarlo antes que nada.
- Tranquilizar al herido y sobre todo a los compañeros, calmar los temores del herido, que es lo poco que podemos hacer que es importante.
- No dar de beber a una persona que haya perdido el conocimiento
Recientemente, se ha instaurado de forma universal tanto en España como en Francia el número de teléfono 112. Si no se dispone de otro, se puede utilizar para simplificar las cosas.
COMO DAR AVISO EN CASO DE ACCIDENTE
- Lugar exacto donde ocurrió el accidente, si es posible ubicarlo en el mapa.
- Estado del herido a nuestro entender.
- Hora del accidente.
- Tiempo atmosférico en la zona del accidente.
- Dar la información exacta pues puede costar la vida a los rescatadores si omitimos algún dato importante.
- Señalizar la zona de toma del equipo de rescate mas cercana al herido sin poner en riesgo a nadie.
- Informa a los Grupos de Socorro sobre:
>Descripción del accidente, número de heridos, lesiones y gravedad.
>Cuándo y dónde ha ocurrido. GPS o referencia del lugar.
>Condiciones metereológicas.
>Lugar desde donde se da el aviso.
>Nombre de los accidentados o desaparecidos, itinerario previsto, experiencia en montaña, material y vestuario que llevan, etc...
Reducir el impacto que causa nuestro paso: Las basuras se bajan al contenedor más próximo, y las orgánicas mejor también (no dejar pieles de cítricos ni plátanos, se descomponen mal y no se las comen los bichos). Evitar coger plantas y flores. No cagar cerca de lugares concurridos y cursos de agua; enterrar (10 cm. vale) el "paquete" y quemar el papel higiénico (salvo si se corre el riesgo de meter fuego al monte; en este caso, a la bolsa de la basura). Tener en cuenta que la mierda humana -como la de todos los carnívoros- es altamente contaminante. Ojo con los perros que también defecan pero además pueden encorrer al ganado y atrapar un montón de animalillos: llevarlos atados. En algunas zonas están prohibidos. No encender fuego y evitar acampar por libre. Si no queda más remedio, nada de inútiles zanjas; que al levantar el campamento se quede todo como estaba. No ensuciar con detergentes y restos de comidas arroyos y torrentes. Respetar las propiedades privadas.
Conocer la naturaleza proporcionará al excursionista grandes satisfacciones; intentar aprender algo sobre los paisajes, las rocas, las plantas, la fauna, los ecosistemas... nos ayudará a entrar en un mundo apasionante.
Acompañar grupos requiere un buen conocimiento de todas las técnicas de excursionismo, pedagogía, y una gran responsabilidad. Preparar los itinerarios en función del grupo teniendo en cuenta la edad y la capacidad física. Evitar meterse en berenjenales y camisas de once varas.
Afortunadamente la montaña es todavía en algunas zonas inhóspita y virgen, no esta de más seguir algunas recomendaciones para su conservación y nuestra propia seguridad...
Ante todo hay que disfrutar intensamente la montaña pero con prudencia y paciencia, respetandonos a nosotros mismos y a los demás.
Normas EN LA MONTAÑA
No hacer fuego:
Se trata sin duda del mayor enemigo del monte. Exceptuando las escasísimas zonas donde esta permitido y acondicionado hacerlo hay que abstenerse de ello. Si nos percatamos de un incendio hay que avisar rápidamente y si se puede, colaborar en su extinción.
Respetar la vida:
Hay que evitar el destruir todo tipo de vida animal y vegetal. Hasta el más pequeño de los organismos cumple una función en la naturaleza aunque parezca inservible o venenoso.
No dejar basura:
La naturaleza no esta diseñada para absorber nuestros desperdicios, así que lo mejor es regresar con ellos en una bolsa de plástico o depositarlos en el contenedor apropiado más cercano.
Erosión:
No se debe circular con vehículos a motor fuera de las zonas permitidas para ellos, esta regla también viene bien para nuestro tránsito por el monte que debe ser el mayor tiempo posible por caminos, sendas y zonas de paso, todo esto para degradar lo menos posible el medio.
No alterar:
Respetar cuanto se pueda la tranquilidad y el sosiego que nos aporta la montaña es sin duda primeramente beneficioso para nosotros que de este modo podremos disfrutarla más e incluso contemplar bastante fauna, que al contrario, de ir escuchando o cantando la última canción del verano sería imposible observar. Además seguro que los otros excursionistas y los animales que cuidan de sus crías nos lo agradecerán...
Dejar las cosas como están:
Aunque es una lástima que numerosas partes del monte y la naturaleza estén vedadas y acotadas deberemos respetar las zonas privadas, cerrando las puertas y cercas por las que pasemos para que no se escape el ganado u otros motivos.
El perro:
En caso de acompañarnos de la agradable compañía de este amigo, es aconsejable vigilarlo todo el tiempo que se pueda, extremándola con la proximidad de ovejas, vacas u otros animales que son de normal presencia en el campo. Hay que controlarlo también en caso de que este alarme o asuste a otros excursionistas, en especial si van con niños. También habrá que tener cuidado si en algunos casos procede con excesiva curiosidad ya que puede ser agredido por otros perros adiestrados o mas agresivos como guardianes de fincas o rebaños.
Seguridad y recomendaciones
Previsión y prevención:
- El número mínimo aconsejable para aventurarse en la montaña es de tres personas; una atiende al herido y la otra acude a por ayuda.
- Nunca salir con muy mal tiempo o condicionnes climatológicas extremas.
- Antes de partir, describirle a alguien el itinerario aproximado que vayamos a realizar y hora-día de regreso, o si esto no puede ser comentarlo con alguien de la zona. Esto en caso de necesidad o imprevisto facilitará nuestra localización.
- Es recomendable realizar cursos de primeros auxilios y formación técnica.
Equipo:
Siempre ir equipado con el material necesario a la salida a realizar, la mochila debe ser lo mas ligera posible, sin transportar cosas superfluas y en la que no debería faltar:
Parece una superchería el llevar siempre todos estos objetos (que nunca llegan a pesar mas de 1 kilo), pero hasta que no los necesitas no sabes cuan importantes son... Por supuesto si salimos con tiempo invernal donde encontraremos gran cantidad de nieve y hielo son imprescindibles los crampones y el piolet, además de saber usarlos, claro.
Ropa:
- Generalmente vestimentas ligeras y aislantes para afrontar condiciones extremas de temperatura. En determinados casos y dependiendo de la ruta será necesario también que sean bastante resistentes al desgaste y la abrasión.
- En condiciones invernales por supuesto la adecuada para ello y en este caso no esta de más que corten el viento, sean transpirables e impermeables.
Calzado:
- Elemento muy importante en toda salida es el acomodo de nuestros pies.
- Siempre será calzado tipo botas, adecuándose al terreno a transitar, de peso ligero para menor cansancio, impermeables y consistentes para el hielo y la nieve.
- Generalmente con una suela fuerte, con buen dibujo y buen agarre.
- Los calcetines, de lana suave (es recomendable un par de repuesto).
- En condiciones de frío, lluvia o nieve abundantes el gore-tex en los calcetines o en las botas nos impermeabilizaran los pies.
- Evitar uno de los errores más comunes; el estrenar el calzado en una excursión. Esto puede provocar gran sufrimiento e incomodidad a nuestros pies provocando rozaduras y heridas. Lo mejor es "domarlas" unos cuantos días antes con paseos o salidas cada vez mas largas.
Limitaciones:
- El montañismo es un fabuloso deporte siempre que reconozcamos nuestras posibilidades y limitaciones; siempre realizar una ruta o ascensión que reconozcamos plenamente posible de realizar.
- Si en la ruta o ascensión nos encontramos con un paso comprometido-peligroso y no nos encontramos con seguridad o fuerzas para afrontarlo, se debe buscar otro camino o abstenerse, hay muchos más días para intentarlo cuando nos veamos con más energías o nos encontremos con la experiencia suficiente.
Calentamiento y ritmo:
- Al comenzar la ruta o la ascensión es recomendable antes de comenzar a andar el realizar algunos estiramientos y de igual forma acabar la jornada, esto minimizará el riesgo de lesiones además de tonificar los músculos y calentarlos.
- Al principio es mejor llevar un ritmo más sosegado para ir adaptando los músculos y el cuerpo al esfuerzo.
- Después hay que tratar de llevar un ritmo constante para no fatigarnos, y si vamos en grupo no hay que olvidar que "...el grupo es tan fuerte como el más débil de sus componentes.." así que hay que ser respetuosos para con los menos preparados, aunque esto no quita que se pueda dividir el grupo en dos o varios para permitir la comodidad y el disfrute de todos.
Alimentación:
- Lo mejor son los alimentos de alto contenido calórico y de poco volumen, tratando de ingerirlos en comidas frecuentes y en poca cantidad, esto ayudará a digerirlos mejor y a que nuestro ritmo no se vea alterado, al contrario que las comidas copiosas que producen pesadez y desánimo a la hora de reanudar la marcha.
- La bebida se debe ingerir también a menudo y en poca cantidad, aunque no tengamos sensación de calor o de sed, para impedir la deshidratación. Preferentemente es mejor no llevar bebidas de tipo alcohólico ya que reducen la forma y los reflejos, por lo que es mejor evitarlas y aún mas cuando se camina o escala.
Situaciones de emergencia o peligro
Tormenta:
Sin duda es uno de los casos de emergencia con el que mas nos encontraremos debido a su promiscuidad (sobre todo en Verano aunque no cabe descartar fechas cercanas). Los peligros derivados de las tormentas son principalmente los rayos y las trombas de agua y crecida de aguas en ríos, ramblas, barrancos, vaguadas...
Los rayos a pesar de ser un fenómeno singular y poco predecible son un elemento peligroso y muy a tener en cuenta. Estos se producen cuando el aire que normalmente es aislante se convierte en conductor y la diferencia de potencial entre las propias nubes y las nubes y la tierra los origina. El fenómeno luminoso es el relámpago, y el trueno se produce por el calentamiento del aire y el vacío creado por el rayo.
Las temperaturas aproximadas que crea un rayo son del orden de 8.000º y 30.000º grados centígrados, y las tensiones originadas pueden ir de 10 a 100 millones de voltios con una intensidad de 25.000 amperios. Para hacernos una idea como ejemplo fallecen en España por promedio al año 10-12 personas por descargas eléctricas, sin contar los heridos o las secuelas, por lo que todas las precauciones son pocas.
Lo mejor como en las demás emergencias es la prevención y tratar de evitar encontrarnos debajo de una tormenta, aunque esto no siempre se puede evitar.
Previsión:
- Observar si el cielo oscurece, visión de rrelámpagos, si el viento arrecia o si se escuchan truenos.
- Tratar de acabar de ascender o terminar unna salida o etapa en Verano antes de las cuatro de la tarde, a partir de estas horas es cuando se forma el mayor número de tormentas.
- Desistir en el intento de hacer cumbre o tterminar una ruta en el caso de que veamos formarse un cumulonimbo en clara progresión hacia tormenta en la dirección en la que nos dirigimos.
- Estar atentos a los partes meteorológicos y no partir hacia media o alta montaña con riesgo claro de tormentas.
- Podemos encontrarnos con un singular fenómmeno; podríamos sentir un cosquilleo extraño en la piel, que se nos erice el cabello y que los objetos metálicos o que terminen en punta metálica emitan un extraño zumbido parecido al de una colmena y que produzca chispas o destellos. Esto se produce porque se están desplazando las cargas eléctricas que generan las tormentas y el aire en el que nos encontramos se ha vuelto conductor...en ocasiones entre dos excursionistas cercanos entre sí y sin tocarse puede producirse una molesta descarga. Esto nos indica la proximidad de una tormenta que nos puede afectar entre media hora o dos horas después.
En cambio si notamos alguno de estos fenómenos en medio de una tormenta nos encontramos en peligro porque es señal de que un rayo va a caer HAY QUE ECHARSE AL SUELO INMEDIATAMENTE.
Precauciones en una tormenta:
- Retirarse de todo lugar alto; cumbrre, cima, loma, cresterío... y refugiarse en zonas bajas no propensas a inundarse o recibir avenidas de agua.
- NUNCA echar a correr durante una tormennta y menos con la ropa mojada, esto es muy peligroso. Creamos una turbulencia en el aire y una zona de convección que puede atraer el rayo.
- Deshacerse de todo material metálico (piolets, bastones, mochilas con armazón...) y depositarlo a más de 30 metros de distancia. Los rayos aprovechan su buena conducción.
- NUNCA refugiarse debajo de un árbol o uuna roca o elementos prominentes solitarios. Un árbol solitario por su humedad y verticalidad aumenta la intensidad del campo eléctrico. En cambio un bosque aunque sea pequeño (no un grupo de árboles) puede ser un buen refugio cobijándonos debajo de los de menor estatura.
- Alejarse de objetos y elementos metáliccos como; vallas metálicas, alambradas, tuberías, líneas telefónicas e instalaciones eléctricas, railes de ferrocarril, bicicletas y motocicletas, maquinaria...
La proximidad con grandes objetos metálicos es peligrosa incluso cuando no se esta en contacto con ellos, ya que la onda de choque producida por el rayo calienta sobremanera el aire lo que puede producir lesiones en los pulmones. - Alejarse de terrenos abiertos y despejaados, como praderas, cultivos y campos de golf. En estas zonas sobresalimos bastante del terreno y nos convertimos en pararrayos.
- Aislarse del suelo y del contacto con ccharcos o zonas mojadas.Salir inmediatamente y alejarse de ríos, piscinas, lagos, el mar y otras masas de agua.
- Alejarse y NO refugiarse en pequeños eddificios aislados como graneros, chozas, cobertizos...las tiendas de campaña tampoco son seguras.
- NO refugiarse en la boca de una cueva nni al abrigo de un saliente rocoso, el rayo puede echar chispas a través de estas aberturas, algunas son incluso canales naturales de drenaje para sus descargas. Solo estaremos seguros en una cueva si es profunda y algo ancha, mínimo un metro a cada lado.
- La posición de seguridad mas recomendadda es colocarse quieto de cuclillas, lo mas agachado posible. Esta posición nos aislará bastante ya que no sobresalimos mucho sobre el terreno tocando solo el suelo con el calzado que según su material nos aislará mucho más.
Podemos sentarnos o tumbarnos sobre un objeto o material SECO y AISLANTE para estar más cómodos, incluso sobre la mochila si no tiene armazón metálico. - Si notamos cosquilleo en el cuerpo, se noss eriza el cabello, o vemos brillar y echar chispas un objeto de metal HAY QUE ECHARSE AL SUELO INMEDIATAMENTE porque la descarga de un rayo es inminente.
- Si se va en grupo es aconsejable disperrsarse unos metros y adoptar las posiciones y precauciones de seguridad, en caso de ir con niños para evitar el pánico o el extravío mantener contacto visual y verbal con ellos. Si un rayo afecta a una persona las demás en contacto pueden verse afectadas por la descarga, por esto mismo también es recomendable alejarse de rebaños y grupos de mamíferos.
- Apagar walkie-talkies y teléfonos móvilles, cuyas radiaciones electromagnéticas pueden atraer los rayos.
- El mejor sitio para refugiarse a la inttemperie durante una tormenta es un vehículo cerrado, un coche no descapotable, furgoneta, camión... Dentro debemos apagar el motor, bajar la antena de la radio y desconectarla, cerrar las ventanillas y las entradas de aire. Aunque caiga un rayo en el vehículo este se cargará solo por el exterior mientras que el interior quedará intacto, fenómeno conocido como "Jaula de Faraday", por si acaso de todos modos es mejor no entrar en contacto con ningún cuerpo metálico.
- Es totalmente falsa le creencia popularr de que un rayo no cae dos veces sobre un mismo lugar.
Si nos encontramos en una vivienda, refugio o cabaña:
- No asomarse al balcón o ventanas abierttos para observar la tormenta.
- Cerrar puertas y ventanas para evitar ccorrientes de aire.
- Alejarse de la chimenea y NO hacer fueggo en ella o apagarlo si esta encendido. De las chimeneas asciende aire caliente cargado de iones, lo que aumenta la conductividad del aire abriendo un camino para las descargas eléctricas actuando como un pararrayos.
- En caso de hallarnos en un piso o vivienda, hay que desconectar los electrodomésticos, los aparatos eléctricos y las tomas de antena de televisión ya que el rayo puede entrar por las conducciones de electricidad y TV causando daños o la destrucción de estos objetos.
- Una buena manera de aislarse es sentarse en una silla que no sea de metal apoyando los pies en la mesa u otra silla tampoco metálicos. Lo mejor es tumbarse en una cama o litera más aún si son de madera.
En el caso de que una persona sea alcanzada por un rayo:
- La descarga eléctrica no permanece en ellaa, se puede atender con toda seguridad.
- La víctima puede tener quemaduras donde fuue alcanzada por la descarga y también por donde esta salió, y en las zonas en contacto con partes metálicas. También puede tener dañado el sistema nervioso, haber perdido la visión y la audición y tener algún hueso roto.
- En todo caso hay que pedir urgentemente assistencia médica y si no respira o el corazón ha dejado de latir tratar de reanimarla con los procedimientos habituales de primeros auxilios.
Incendio forestal:
El primer indicio que notaremos es el humo o su olor, puede que incluso oigamos las llamas antes de que las veamos, incluso se puede advertir un extraño comportamiento en los animales antes de que comprendamos que lo origina.
Lo primero si no nos encontramos en peligro es avisar de su existencia y tratar de sofocarlo si es pequeño o podemos intentarlo:
- La mejor opción es arrojar agua a la baase de las llamas si disponemos de esta, más si el fuego crece rápidamente no merece la pena buscarla y es mejor apagarlo por otros medios. También se puede arrojar tierra para privar de oxigeno a las llamas.
- Con una rama frondosa y verde privar ell oxígeno de las llamas batiendo de arriba a abajo pero de manera no violenta ya que alimentaríamos aún más las llamas y esparciríamos las chispas. Es mas eficaz si disponemos de ello hacerlo con una manta pesada o un abrigo que no se inflamen fácilmente.
- Si tenemos la suerte de sofocar el incendiio no hay que confiarse ya que pueden quedar brasas escondidas que lo hagan reavivarse más tarde. Informar a los bomberos o fuerzas de seguridad de donde se produjo el incidente.
Si nos vemos sorprendido por el fuego y además es intenso hay que tratar de escapar, hay que tener cuidado y pensar serenamente por donde vamos a escapar o refugiarnos, estos incendios pueden ser muy virulentos y tener un frente de varios kilómetros:
- Mantener un primer momento de fría serenidad para evaluar la situación y encontrar una ruta de escape.
- Si la respiración se dificulta por el humoo, tomar un paño o una tela, mojarla y proteger la nariz y la boca.
- El fuego se propaga siempre más rápidammente en la dirección del viento, el humo indicará su dirección.
- El fuego se propaga a mayor velocidad ccuesta arriba, por lo que hay que tratar de no dirigirse a terreno elevado
- Las vaguadas actúan como chimeneas en casoo de incendio. El calor y el humo pueden ser trampas mortales si queda atrapado en una vaguada.
- Dirigirse hacia una zona despoblada de arboles y vegetación, un cortafuegos, una carretera, río, balsa, piscina... Un río es el mejor cortafuegos, aunque las llamas puedan salvarlo se esta razonablemente seguro dentro del agua.
- A veces la mejor ruta de escape es por zona ya quemada, si no la encontramos o nos vemos rodeados por el fuego, podemos atravesar una zona de incendio menos intensa cubriendo todas las partes expuestas de piel y el pelo con trapos o ropa mojada, también debemos cubrir la boca y la nariz con otro paño húmedo. Ahora solo queda escoger una zona de incendio poco activo y con la menor vegetación posible, hay que escoger el sitio cuidadosamente, aspirar profundamente, taparse la boca y la nariz con el trapo húmedo y...CORRER. Esta opción solo hay que tomarla en caso de ver una posibilidad muy clara de atravesar parte del fuego o en caso desesperado de encontrarse rodeado por las llamas ya que es muy peligroso, NUNCA cruzar por una zona de llamas si no se ve lo que hay tras ellas.
- Si se prenden nuestras ropas o las de ootra persona NO hay que correr ya que esto alimenta aún más las llamas, hay que tratar de hacer rodar a esa persona o cubrirla con una manta o tierra...
Niebla intensa:
- En todo momento no perder la calma.
- Estudiar la situación con serenidad.
- Ayudarse del plano y de la brújula para orientarse.
- En caso extremo, especialmente aquel en quue nos encontremos rodeados de nieve y la visibilidad sea totalmente nula; permanecer donde nos encontremos tratando de no perder temperatura y de alimentarnos, siempre con tranquilidad.
- Si la situación persiste durante muchas hooras o se hace de noche, pedir ayuda. Siempre es mejor que aventurarse hacia la nada o cualquier peligro potencial que no veamos.
Avalancha o Alud de nieve:
El mejor remedio para luchar contra un alud es la prevención, y el conocimiento a fondo de la nieve y sus propiedades.
Hay tres tipos de aludes:
- Alud de nieve reciente; Suelen ser los más espectaculares, la nieve al iniciar el descenso se mezcla con el aire creando una masa de aerosol que alcanza enormes velocidades entre los 100-400 km/h, el frente del alud va rechazando el aire que encuentra a su paso creando una onda de choque que arrastra todo lo que encuentra a su paso.
- Alud de placas; Producido cuando una capa de nieve no se compacta de manera firme sobre la que se ha asentado formándose así placas y el peligro de desprendimiento. Su velocidad es mucho menor (20-60 km/h) pero suele producir el 70-80% de accidentes mortales entre esquiadores y alpinistas.
- Alud de fondo (tipo nieve húmeda); Se forman cuando en un ascenso de temperaturas o en primavera en el deshielo, el agua absorbida por las capas superiores se filtra a las inferiores actuando como un lubricante y aumentando el peso y la pérdida de cohesión. Se mueve más lentamente que los otros arrastrando árboles, rocas y formando grandes bolas de nieve, cuando se detiene se congela rápidamente haciendo más difícil el rescate.
En todo caso a la hora de ponerse en marcha es conveniente atender estas recomendaciones;
- La mayor parte de los aludes se forman denntro de las 24 horas posteriores a una nevada en laderas con una inclinación de 20º a 60º, especialmente entre los 30º y 45º.
- Evitar las laderas convexas cubiertas de nnieve ya que esta se encuentra en tensión, también laderas a sotavento donde la nieve se acumula con facilidad y además se hace inestable.
- No transitar durante el mediodía por las lladeras de nieve expuestas al sol y en cambio hacerlo por zonas de sombra. Después del mediodía hay que tratar de hacerlo por las laderas que han estado expuestas al sol y evitar las que lo reciben ahora por primera vez.
- Una lluvia o un ascenso de temperaturas deespués de una nevada puede aumentar el riesgo de avalanchas. Las nevadas abundantes con baja temperatura puede provocarlas también debido al poco tiempo que tiene para estabilizarse la nieve.
Si desafortunadamente se nos echa uno encima o nos vemos inmersos ya en uno de ellos:
- Acostarse para recibir el menor impacto posible.
- Tratar de "nadar" usando una brazada tipo estilo libre para intentar mantenerse encima del alud.
- Cubrirse la nariz y la boca para immpedir la entrada de nieve ya que la muerte se suele producir por asfixia al inhalarla en grandes cantidades.
- Cuando el alud ha cesado, desprenderse dell material superfluo y tratar de construir una cavidad alrededor lo mas grande posible antes de que la nieve se solidifique. Intentar alcanzar la superficie, mas si resulta imposible no hay que malgastar el oxígeno.
- Reservar energía para gritar con toda la fuerza posible cuando se escuchen personas o el rescate cerca.
No esta de más si realizamos abundantes salidas por zonas de nieve y con riesgo de aludes el equiparse con un aparato LEVA o ARVA y algunas palas y sondas.
Un equipo ARVA es un aparato emisor-receptor de baja frecuencia utilizado para localizar a las víctimas de un alud, todos funcionan a la misma frecuencia (457 khz), se alimenta de pilas, y suelen poseer un a autonomía aproximada de 200-300 horas de emisión y 30-50 de recepción. En caso de accidente el procedimiento de localización exacta de las víctimas con las sondas requiere de algo de entrenamiento.
Congelaciones:
Son lesiones causadas por una exposición prolongada al frío, o corta pero intensa.
Una congelación en los tejidos del cuerpo puede verse favorecida o acuciada por algunos factores externos e internos:
- Factores externos; baja temperatura, viento y humedad.
- Factores internos; hipoxia y deshidratación.
Las congelaciones suelen producirse más fácilmente en los extremos de los miembros como pies y manos, puntos vulnerables como orejas, pómulos y punta de la nariz, y toda zona de la piel expuesta al viento.
Lo mas peligroso de las congelaciones es que se producen sin dolor, por lo que hay que estar muy atentos para descubrir alguno de estos síntomas en nuestro cuerpo o en el de nuestr@s compañer@s en tiempo frío o con fuerte viento:
Síntomas:
- Picazón en la piel.
- Rigidez muscular en la zona afectada.
- Zonas de piel hinchadas, entumecidas, rígiidas o insensibles. Sensación de que la carne se ha convertido en madera.
- Zonas de piel cerosas, blanquecinas o enneegrecidas (paso intermedio hacia una necrosis progresiva del tejido).
Grados de congelación:
En el menor de los casos casos nos podemos encontrar con el serio aviso de dedos de los pies o las manos u otra parte del cuerpo que se vuelve algo insensible y rígida. Cuando los recalentamos se produce un entumecimiento doloroso que indica que se recupera la sensibilidad.
Al igual que las quemaduras, las congelaciones se clasifican en tres grados:
- Primer grado; Palidez, eritema en eel postcalentamiento, ligera cianosis y sensibilidad reducida. La parte del cuerpo se enrojece y se hincha. Se recupera al cabo de unos días.
- Segundo grado; Se forman ampollas, eritema y cianosis más persistentes, sensibilidad más reducida o ausente. La zona congelada puede evolucionar hacia una necrosis o hacia una completa restitución, aunque lo más normal es que cicatrize en pocas semanas, pero la sensibilidad puede no recuperarse hasta pasado incluso varios meses y surgir posibles secuelas de hipersensibilidad al frío.
En una congelación profunda de segundo grado (palidez, cianosis importante, anestesia del tejido, etc.) la necrosis se limita a la dermis y se da una curación a las cuatro o seis semanas con secuelas. - Tercer grado; Se origina el edema, la zona se vuelve gris y gangrenada para luego ser invadida por una necrosis profunda, llegando a aparecer la anestesia total y la muerte si no se trata; su evolución degenera en la necrosis afectando al hueso, la amputación y una serie de secuelas inevitables, incluidas las psicológicas.
Prevención en condiciones de temperatura muy baja:
- Ir siempre bien abrigado sin exponer durannte mucho tiempo zonas del cuerpo al exterior o al viento.
- Los guantes, el pasamontañas y un calzado aislante, son imprescindibles.
- No llevar vestimenta ni prendas ceñidas quue impidan la circulación sanguínea.
- Hacer ejercicios con los músculos de la caara para favorecer el riego e impedir la aparición de costras.
Tratamiento:
El tratamiento de las congelaciones es algo complicado y sutil, ya que los miembros congelados una vez recalentados se hinchan y no se puede hacer mucho más, por ejemplo en el caso de los pies una vez descalzos estos se hinchan y no se pueden volver a calzar. Si no nos vemos seguros de actuar correctamente es mejor pedir ayuda urgente, esperarla o evacuar al herido.
- NUNCA exponer una zona congelada al fuego.
- Se han demostrado muy contraproducentes laas antiguas friegas con nieve o alcohol, los azotes con las cuerdas, los baños con agua hirviendo o los alternativos en agua fría y caliente. Las zonas afectadas aunque se encuentran insensibles siguen siendo igual de frágiles que antes.
- Una buena recuperación se puede lograr mediante un calentamiento general del cuerpo, tomando abundante líquido, siendo más eficaz aún la ingesta de bebidas calientes.
- El tratamiento de las zonas congeladas se puede llevar a cabo mediante un baño en agua tibia (37-40 ºC) con una solución antiséptica yodada durante 30 minutos. Esta acción terapéutica ha de darse repetidas veces. Después ha de recubrirse con material estéril y proteger con vendajes que no compriman. También se prescribe el uso de analgésicos, pues suele haber un dolor intenso.
Deben emplearse antibióticos para evitar infecciones, sobre todo si aparecen ampollas que no deben secarse o drenar porque protegen el tejido.
Hipotermia:
Sobreviene la hipotermia cuando la temperatura general del cuerpo es inferior a 35 ºC, producida por un estado en el que el organismo no puede generar calor con la misma rapidez que lo pierde.
La hipotermia no es un mal exclusivo de la montaña ni de regiones frías, podemos encontrar casos muy frecuentes de hipotermia por ejemplo en náufragos.
En la montaña puede sobrevenir por:
- Agotamiento o fatiga extrema.
- Inadecuada alimentación.
- Inadecuada vestimenta o equipo.
- Inmovilización por un traumatismo tras unaa caída.
- Noche a la intemperie con insuficiente equuipo producida por extravío, pérdida o falta de tiempo.
- Caída en una grieta.
- Ser arrastrado o cubierto por un alud.
Se puede clasificar la hipotermia también en varios grados:
- Principio de hipotermia; sensación muy inttensa de frío, y algo de somnolencia. 35-33 ºC
- Hipotermia moderada; espasmos y rigidez muuscular, acusado deseo de dormir y habla dislocada. 32-29 ºC
- Hipotermia grave; confusión mental, coma, insuficiencia cardiorrespiratoria, falta de pulso y muerte. 28 ºC o menos
Síntomas generales:
- Temblores súbitos e incontrolados.
- Conducta irracional, súbitos ataques de ennergía seguidos de apatía.
- Disminución de la capacidad de respuesta aa preguntas e instrucciones.
- Pérdida de coordinación, tropiezos y caídaas.
- Jaquecas, visión borrosa y dolor abdominall.
- Colapso estupor o pérdida de conocimiento..
Factores agravantes:
- Baja temperatura del aire y/o ropa empapadda junto con vientos fuertes.
- Inmersión en agua.
- Herida u otra incapacidad que impida generrar calor.
- Delgadez extrema.
Previsión:
- Protegerse lo más posible del viento y de la pérdida de temperatura.
- Reemplazar la ropa y las prendas mojadas ppor secas si se dispone de ellas, o bien secarlas.
- Alimentarse bien y adecuadamente.
Tratamiento:
- Impedir aún más la pérdida del calor protegiendo del viento y el frío lo más posible. Recubriendo a una persona afectada con una manta de aluminio o de supervivencia ayuda a reflejar el poco calor que le quede y el que vaya consiguiendo al tratarlo.
- Aislar al afectado del suelo y suministtrarle calor POCO a POCO, ya sea con otros cuerpos o piedras calientes, etc...
- El afectado debe moverse con mucho cuiddado porque el corazón en estos casos no tolera el más mínimo esfuerzo. NUNCA trasladarlo a un lugar muy caluroso de golpe porque puede comportar una parada cardíaca.
- Suministrar líquidos calientes y alimenntos azucarados si no ha perdido la consciencia.
Deshidratación:
Mal muy generalizado en época estival o regiones afectadas por clima rigurosamente caluroso o por sequía. Comúnmente a no ser por razones de accidente o fuerza mayor es muy poco probable que nos afecte llevando suficientes reservas de agua.
Síntomas:
La deshidratación se hace cada vez más evidente conforme se pierde más líquido. El agua constituye un 75 % del peso corporal, es decir unos 50 litros en el ser humano medio.
- 1-5 % de pérdida de líquido; sed, ligera incomodidad, falta de apetito, piel encendida, impaciencia, somnolencia, náuseas.
- 6-10 % de pérdida de líquido; somnolencia, jaqueca, respiración trabajosa, ausencia de saliva, lenguaje confuso, incapacidad para andar.
- 11-20 % de pérdida de líquido; delirio, lengua inflamada, incapacidad de tragar, visión borrosa, piel entumecida y arrugada.
Prevención y tratamiento:
- Disponer del suficiente abastecimiento de agua para la salida a realizar.
- NO esperar a la sensación de sed para bbeber porque ya es una señal de desequilibrio en el organismo.
- Tomar bebidas poco azucaradas con calor. CCon el frío en cambio conviene que lo sean.
- El agua obtenida de la fusión de la nieve o el hielo puede producir calambres y desordenes digestivos al carecer completamente de sales minerales. Sino hay más remedio se puede incluir en el agua estas sales u obtenerlas de los alimentos.
- El agua de arroyos, ríos, acequias y fuenttes siempre son una incógnita de potabilidad si no viene indicado lo contrario por muy buena o transparente que sea, es conveniente tratarla.
Golpe de calor:
Es la consecuencia mas grave derivada de una excesiva actividad física o exposición al sol. Puede llevar en casos extremos a la muerte si no se actúa eficaz y rápidamente.
Síntomas:
- Piel caliente y seca.
- Rostro enrojecido y enfebrecido.
- Transpiración cesante o que ha cesado.
- Fuertes jaquecas acompañados frecuentementte de vómitos.
- Puede perderse el conocimiento.
Tratamiento:
- Llevar al afectado a la sombra.
- Quitar las prendas exteriores.
- Enfriar poco a poco con agua TIBIA (el agua fría le hará elevar la temperatura del cuerpo) y abanicar.
- NO sumergir a la persona en agua fría, salpicarla sobre el cuerpo.
- Acostar y dejar reposar al afectado en unaa depresión húmeda con ventilación.
- Hacer que beba agua si esta consciente, o cuando recupere la consciencia.
- Cuando la temperatura sea normal habrá quee cambiarle la ropa y abrigar ligeramente para evitar los escalofríos.
Quemaduras por el sol:
La intensa radiación del sol puede llegar a producir quemaduras serias en la piel de hasta segundo grado.
Prevención:
- Llevar crema protectora de alta graduación y aplicarla a la piel que se va a ver expuesta al sol media hora antes, es recomendable seguir aplicándose cada dos horas durante la exposición.
- Proteger los labios para evitar que se resequen aplicando vaselina o barras protectoras.
Tratamiento:
- En caso de producirse alguna quemadura serria, evitar más la exposición al sol permaneciendo el mayor tiempo posible en la sombra.
- Si aparecen ampollas, NO perforarlas y cuubrirlas con gasas o vendas limpias.
- Si son muy graves o afectan una gran zona del cuerpo, recibir asistencia médica cuanto antes.
Irritación ocular:
Los ojos pueden verse afectados por una prolongada exposición al sol, partículas de polvo o el resplandor de la nieve.
Prevención:
- Llevar gafas de sol que abarquen toodo el ojo, que deben ser especiales para montaña o glaciar o tipo máscara de esquí en caso de nieve abundante y con el filtro UVA apropiado y certificado.
- En todo caso de irritación severa es acconsejable cesar toda actividad y acudir lo antes posible al oculista.
Oftalmía de las nieves:
Se trata de una ceguera o conjuntivitis temporal a causa de la exposición al sol o la reverberación.
La oftalmía nival se desencadena por la carencia de gafas o de laterales en éstas o insuficiencia o mala calidad del filtro.
Síntomas:
- La sintomatología se da entre 3 y 12 horas después de la exposición con sensación de quemazón, impresión de tener granos de arena bajo los párpados, fotofobia, lagrimeo y enrojecimiento de los ojos.
- La oftalmía puede degenerar en ceguera, es invalidante por lo que a causa de ella pueden darse situaciones peligrosas, sobre todo teniendo en cuenta el abrupto relieve de la montaña.
Tratamiento:
- Detener la exposición a la radiación inmeddiatamente y transitar lo mas posible por la sombra, descender y acudir lo antes posible a un oculista.
- Alivia descansar a semioscuras con ayuda dde colirios.
Prevención:
- Llevar gafas de sol que abarquen toodo el ojo, que deben ser especiales para montaña o glaciar o tipo máscara de esquí en caso de nieve abundante y con el filtro UVA apropiado y certificado.
Enfermedades provocadas por la altitud
Mal de altura o de montaña:
Se produce por una aclimatación inconclusa a la altitud ya sea por diversos factores. Hablando en cifras uno de cada dos alpinistas lo sufre y uno de cada cien sufre complicaciones más graves como el edema, y el 70% de los practicantes en trekkings y expediciones a gran altura también se ven afectados por el mal de altura.
Esto se suele dar en las primeras horas de llegar a alturas por encima de los 2.500-3.000 metros. Depende de la adaptación del cuerpo con el medio. El tratamiento: analgesia suave, tipo aspirina o paracetamol, descanso y beber abundantemente.
Los primeros síntomas suelen ser; dolor de cabeza, náuseas y gran sensación de flojedad. Hay que tener cuidado si se presentan estos síntomas y no tratar de ocultarlos achacándolos a una debilidad o menor capacidad física ya que hasta incluso los mejores alpinistas los sufren. También hay que poner atención de no confundirlos con una fatiga normal, cambio de hábitos alimenticios o simplemente la incomodidad de un refugio.
El problema surge cuando personas que se adaptan mal a la altitud, que ascienden demasiado rápido o que no atiendan a los síntomas del mal de montaña y sigan subiendo, ya que se puede evolucionar a un edema cerebral de altitud o a un edema pulmonar de altitud. Pueden llegar a ser extremadamente graves, hasta el punto de causar la muerte.
A continuación una tabla con los síntomas y su tratamiento:
Síntomas | Puntos por síntoma | |
| 1 punto por síntoma | |
| 2 puntos por síntoma | |
| 3 puntos por síntoma | |
Puntos | Tipo de mal de altura | Procedimiento |
1a3 | Ligero | Aspirina o paracetamol |
4a6 | Moderado | Aspirina, reposo y no continuar la actividad |
>6 | Severo | Descenso |
El mejor tratamiento para el mal de altura es la prevención, por lo hay que tener en cuenta los factores más significativos que propician su aparición y contrarrestarlos:
- No ascender muy rápido a una gran altittud; por encima de la cota de 2.500 metros hay que realizar la ascensión de manera escalonada no acumulando un desnivel adicional por noche de entre 300 y 500 metros en días consecutivos.
- Ascender lo suficientemente y adecuadammente alto para adaptarse; es decir provocar al organismo las reacciones necesarias de aclimatación a una altitud adecuada, para poder afrontar la actividad con seguridad. Esto solo es necesario en expediciones y ascensiones en alta montaña.
- No permanecer a gran altitud mucho tiemmpo; el ser humano no esta preparado para la vida a más de 5.500 metros, prueba de ello es la inexistencia de poblaciones permanentes en estas cotas. Esto es debido por una norma física, ya que nuestro cuerpo a partir de esa altitud no puede compensar las pérdidas soportadas aunque se haga vida normal o se aclimate adecuadamente y se va degradando poco a poco.
Edema pulmonar y edema cerebral
Debemos matizar q estas enfermedades se producen a unas altitudes muy elevadas de las que encontraremos en la montaña palentina, pero nunca esta mal saberlo por si seguimos progresando en las altitudes.
El edema pulmonar de altitud, el encharcamiento de los pulmones, se da en relativamente pocas horas y es debido fundamentalmente a una mala aclimatación. Puede empezar con dolor de cabeza, sensación de ahogo, tos leve… para en 6 u 8 presentar un edema pulmonar de altitud.
El edema cerebral es parecido al pulmonar. Se suele ver en altitudes superiores a las que aparecen los edemas pulmonares. Normalmente a partir de un mal agudo de montaña mal atendido. El montañero empieza a tener mala coordinación simplemente al andar, a no poder ponerse la mochila y a padecer alucinaciones. Son los primeros síntomas de un edema cerebral de altitud.
En ambos casos el tratamiento es el mismo: hay que bajar, el descenso inmediato es esencial. Lo que sucede es que a estas elevadas alturas en muchas ocasiones no es posible por lo que debemos llamar a los servicios de rescate inmediatamente.
Cuanto más alto quieres ir, más lento debes subir
Si no se puede bajar por las condiciones que sean, en los dos edemas el resultado es el fallecimiento de la persona. En el caso del edema cerebral se entra en coma por la disminución de todas las funciones neurológicas necesarias provocadas por la falta de suficiente oxígeno a gran altitud. Primero se tienen conductas inapropiadas (andar mal), y luego se va profundizando en la gravedad hasta entrar en coma y hacer un paro cardiorrespiratorio, porque ya no se tiene el sistema nervioso central alerta para mantener todas las funciones.
El proceso es más lento que el del edema pulmonar, por el que la persona fallece en pocas horas anóxica, sin que llegue oxígeno a ninguna parte de cuerpo.
No debemos temer a la montaña ya que hay personas que no sufren ninguna de estas enfermedades, aunque es lo menos frecuente, y otras que lo padecen absolutamente todo, que también es raro. Lo más habitual es un mal agudo de montaña con un dolor de cabeza que en pocas horas se soluciona.
Para evitar en la medida de lo posible estos males de la altura lo más importante es aclimatarse bien y realizar una ascensión por etapas, lentamente. Es lo que dicen los serpas:”cuanto más alto quieres ir, más lento debes subir”. También es importante seguir una dieta rica en hidratos de carbono y estar bien hidratado, beber abundantemente.
Qué sucede en la llamada zona de la muerte
La llamada zona de la muerte, altitudes por encima de los 8.000 metros, es una zona en la que la vida normal durante mucho tiempo no se puede mantener, por la escasez de oxígeno. Nadie puede vivir permanentemente. Los enclaves humanos más altos se sitúan sobre los 4.500-5.000m, uno está en los Andes y otro en el valle de Khumbu, cerca del Everest.
Por encima lo que hay es un desgaste continuo, por la escasez de oxígeno, y una alteración del metabolismo del cuerpo. Las personas llegan en unas condiciones extremas también debido a las bajas temperaturas y por beber y comer poco, porque no se tiene apetito.
Que hacer ante un accidente o situación de emergencia
Mantener la serenidad, asegurar al herido/s y practicar los primeros auxilios pertinentes. No dejar solo al herido/s, si no hay más remedio abrigar y dejar comida y líquido, referenciar el lugar para poder localizarlo después.
Pensar en el aviso más rápido; móvil, radio, refugio, etc.
Datos para los grupos de socorro:
- Descripción del accidente.
- Número de heridos, lesiones y gravedad. -Cuando y dónde ha ocurrido.
- Gps o referencia del lugar.
- Condiciones meteorológicas.
- Lugar desde donde se da el aviso.
En caso de desaparecidos:
- Nombre, itinerario previsto, experiencia en montaña, material y vestuario que lleva.